Aunque al final nunca ejerció como médico, ya que dedicó toda su vida al mundo del manga y el anime (fundó su propio estudio de animación, Mushi Production), llegó incluso a sacarse el doctorado en 1960. Acabó realizando más de 500 mangas, unas ciento cincuenta mil páginas y docenas de producciones animadas.
La obra que reflejó mejor su faceta médica, fue sin duda, Black Jack, creado por su autor en 1973, manga de mayor extensión (unas 4000 pgs.), realizado durante una década aproximandamente. Nos narra las vivencias de un habilísimo cirujano con la cara marcada por una cicatriz, que ejerce sin licencia alguna, pidiendo a sus clientes unas sumas astronómicas a cambio de sus servicios.
Es un personaje amoral, que apenas muestra sus propias emociones, y además resulta ser la envidia de sus compañeros de profesión. Tiene como ayudante a la fiel Pinoko, una adolescente que nació del quiste teratomatoso, (sí, así como lo lees,) de una paciente suya, y que nuestro protagonista reconstruyó en un cuerpo infantil. Pinoko hace las veces de alivio cómico en la serie.
No habría adaptaciones animadas de la serie hasta 1993, habiendo ya fallecido el maestro Tezuka, siendo una adaptación de 10 OVAS realizados por el estudio Tokio Movie Shinsha (Detective Conan, Ampanman,...) A continuación se realizaría un largometraje en 1996, que pude ver el año pasado y que no me gustó especialmente.
En 2003, se emitiría una miniserie de 4 capítulos dirigida por el hijo de Tezuka, donde la trama argumental gira alrededor de la familia de nuestro cirujano favorito, y que finalmente fue ampliada hasta los 61 episodios en ese mismo año Al final, se le cambió el nombre a la serie, ya en vez de llamarse Black Jack a secas, se la rebautizó como Black Jack 21.
Aparte de ser uno de mis mangas favoritos, le he dedicado un post especial a esta obra con el motivo de una nueva edición española que ha sido lanzada por Glènat estos días a raíz de la inaguración del XII Salón del Manga de Barcelona. Una anterior edición recopilatoria de este comic por la misma editorial que salió en 1998, tan sólo constó de 12 volúmenes. La nueva colección promete ser completa y constará de 18 volúmenes con el doble de páginas de su antecesor. Esperaré la venta de cada tomo con mucha ilusión.
No he podido evitar hacer una comparativa con el videjuego Trauma Center. Under the Knife, de la consola portátil, Nintendo DS, en el que tú mismo puedes ejercer como cirujano. Gracias a la pantalla táctil, realizas operaciones muy complicadas a contraleloj, llegando a evitar la muerte del paciente. En el juego comienzas como un doctor novato que va evolucionando a lo largo del juego tanto personal como profesionalmente, como si de un culebrón se tratara. Tu doctor llegará a tener poderes especiales con su bisturí, convirtíendose en un genio de la medicina, como si del mismo Black Jack se tratara.
Reconozco que estuve realmente viciada con el juego. Engancha un montón y es que es una auténtica gozada... además el diseño de personajes "estilo anime" y los detallados planos de las operaciones que no llegana ser algo desagradable a la vista, hacen que no puedas parar de jugar. Por cierto, va a salir una versión para la Nintendo Wii en los próximos meses en nuestro país. Ya estoy deseando poder probrarlo un día de estos. ¿Vosotros no?