domingo, noviembre 25, 2007

Buddy duerme ¡Y crece!

Este es un muestrario de mi album fotográfico personal de Buddy el Virugato... un pequeño monográfico de las fotos que le hago mientras duerme. Me encantan porque esta monísimo y además son las más fáciles de hacer porque se esta quieto. Los que le conocéis personalmente ya lo sabéis, es un auténtico trasto.

En esta fotografía apenas tenía un mes de vida. ¡Era tan pequeño!



En esta ocasión estaba tan relajado que se me quedó dormido encima de mis piernas. Parecía un muñequito. Aun era muy pequeño.



Aquí un detalle de su carita en pleno séptimo sueño.



Se dormía en cualquier lado y con unas las posturas la mar de graciosas.



En esta foto está hecho un ovillo encima de mi cama.



Nuevamente en mi cama, aquí ya se le nota más crecidito.



Le encanta dormir "panza arriba".





Y este es el Buddy actual, al que le he comprado una cama propia, pero que aun no usa mucho.



Un dato curioso... mientras realizaba este post, el minino se quedó dormido en la mesa del ordenador al lado del teclado.... ^_^U

Dedico este monográfico a El Predicador Malvado (él sabe el por qué) y a Nekochan la bloguera más joven y fanática de los gatos que conozco.

domingo, noviembre 18, 2007

Dinner Dash. Sirviendo mesas al estilo del Stylus.

Llevaba un tiempo sin dedicar una entrada a un videojuego en particular, y yo creo que ya iba siendo hora... como aun llevo poco tiempo jugando a los juegos de mi nueva Wii, prefiero esperar un poco más para hacer reseñas sobre alguno de ellos... ya sabéis que me gusta estudiarlos a fondo primeramente.

Así que en esta ocasión voy a hablaros sobre el Dinner Dash para la DS, que aunque es un juego bastante simplón, me ha parecido lo suficiente entretenido para dedicarle unas cuantas líneas.


Flo
, la prota de la historia, harta del monótono trabajo de oficina decide abrir su propio negocio, un restaurante de comida rápida... en el que deberá partir prácticamente desde cero. Su misión será servir mesas con la mayor rapidez posible y dar el mejor trato posible a sus asiduos clientes... gracias al dinero que gane podrá ir haciendo más mejoras en su preciado local. Si nos vemos capaces de ayudarla en su tarea, Flo, podrá abrir 4 negocios más. Uno de comida mejicana, una marisquería, un local retro que haría las delicias de Disco Stu y un restaurante oriental al que todavía no me he llegado.

Pero no nos será tan sencillo, nuestro dominio del Stylus será fundamental a la hora de cumplir nuestra misión, para poder manejar a Flo. Según avancemos de nivel, la dificultad irá subiendo. Cada vez tendremos más mesas a las que servir, llegarán muchos más clientes. Si no tenemos los reflejos suficientes, estos se cansarán de esperar y acarán largándose sin pagar... y para nuestra protagonista, las propinas son muy importantes.



Nos encontraremos con todo tipo de clientes, desde las oficinistas que se molestan por cualquier cosa, la familia con su bebé llorón incluido, los fanáticos de la informática o los hombres de negocios colgados de sus móviles... si no ponemos cuidado donde sentarlos, podrán ser una molestia para los que esten sentados a su alrededor y no dudarán en poner pies en polvorosa y dejarnos con un palmo de narices. Pero eso no es todo, una crítica de cocina ataviada con unas ropas muy horteras vendrá a hacernos la puñeta de vez en cuando, poniendo en evidencia nuestro floreciente negocio.

Los gráficos son muy sencillos y muy coloridos, los creadores le han querido dar un estilo de dibujo manga-anime. La única pega es que al ser tan simplificado, los personajes que aparecen se hacen muy repetitivos, llegando a ser clónicos entre ellos.

Otro fallo sobre el juego es su música, ya que se hace bastante repetitiva. Aunque eso no quiere decir que no se nos pegue cosa mala, especialmente la del restaurante mejicano.



En mi opinión lo mejor es la modalidad de juego de DS a DS. Tiene 3 tipos variantes diferentes; ver quien tiene más resistencia, quien es el primero en servir, y a ver quien recibe más propinas. Te acaba picando cosa mala, se termina muy rápido, no se hace pesado para nada. Además tienes la opción de coger como protagonista a varios personajes diferentes, cocinero incluido. Muy divertido.

Este juego no es más que una adaptación de una serie de videojuegos que salieron para PC. Me encantaría poder jugarlo a ver en que se diferencian una versión de la otra. Según me han informado al ser la pantalla del ordenador más grande que la de la de nuestra portátil, el juego es más sencillo, ya que podemos controlar mejor a los clientes que hacen cola a la puerta de nuestro establecimiento. Y por lo que he podido ver en YouTube tenemos opciones mucho más variadas a la hora de vestir a nuestra muñeca.



Un juego que no exige estrujarte las meninges, que consigue entretenernos un rato en un momento concreto y además puede llegar a enviciarnos bastante. Además al ser tan sencillito es muy jugable y se entiende rápidamente.


sábado, noviembre 10, 2007

Ge Ge Ge no Kitaro. Conviviendo con espíritus durante generaciones

Los Yōkai son un tipo de criaturas creadas por el folklore japonés. Espíritus, monstruos y demonios que abarcan desde el malvado Oni u ogro-demonio, al travieso zorro mágico, Kitsune o al ser acuático llamado Kappa, entre muchos otros. Un mangaka llamado Shigueru Mizuki (1922) creó a partir de estas terroríficas leyendas a un héroe fantasmagórico, Kitaro, que haría las delicias de todos, tanto de los más pequeños, como los más mayores durante varias generaciones, cuya obra obra emblemática es Gegege no Kitaro [Kitaro el del Cementerio] (1959-1969)


Después de estudiar bellas artes, Mizuki dedicó su vida a dibujar manga o a ilustrar teatrillos ambulantes para los niños, poco a poco se fue especializando en el género fantástico. En la 2ª Guerra Mundial tuvo que partir a Nueva Guinea donde perdió su brazo izquierdo. La mezcla del por el horror vivido en combate (padeció malaria y le hicieron prisionero) y el shock que sufrió al perder uno de sus miembros en una explosión, le inspiraron a crear esta fantasmagórica obra.


Su protagonista es Kitaro, un espíritu con forma de niño que viste un Chanchanko (un traje donde supuestamente moran los antepasados de uno mismo). Posee un pelo color ceniza que le tapa media cara para ocultar la cavidad de su falto ojo izquierdo. ¿Y cómo lo perdió? Su padre, tras fallecer... ¡se reencarnó en el ojo de su hijo! Lo más curioso es que tiene cuerpecito con sus brazos y sus piernas y puede hablar y caminar, se encarga de darle consejos cuando se encuentra en apuros (en plan Pepito Grillo ^_^U) El siniestro muchacho, personalmente, me recuerda muchísimo a Ginko, el protagonista de Mushishi, ya que también le falta un ojo, su pelo es gris y sus historias van sobre Yōkais aunque en esta ocasión son llamados insectos.


Otros personajes que pueblan este fantasmagórico manga son la Chica Gato, el Hombre ratón (Nezumi Otoko), e incluso en alguna historia han aparecido monstruos occidentales tales como Drácula o Frankestein. Con un estilo de dibujo entre lo naïf y lo grotesco (puede recordar a Hideshi Hino), y una fuerte tendencia al humor negro, parece mentira que en un principio fuera un cómic destinado para un público infantil o juvenil.

De una temática bastante ecologista, suele abundar la ironía sobre el comportamiento humano y su relación con la naturaleza... ¿Quién es más mostruoso los Yōkais o el propio hombre? Kitaro, suele ayudar a niños en apuros con fuerzas sobrenaturales, como espíritus que poseen bates de beisbol o demonios que abducen niñas y se las llevan a la dimensión de los espejos... Las historias, incluso las más ligeras y humorísticas, están impregnadas de un sentido de lo macabro y una impotencia del ser humano por hacer frente a las fuerzas extrañas que lo dota de un aire malicioso y macabro.



Nuestro protagonista, se verá envuelto en mil y una tenebrosas y delirantes aventuras durante los diez años que dure el manga. No sería hasta 1968 cuando se adaptara en formato anime en blanco y negro a cargo de la Toei. El director de la misma era el sinpar creador y amigo de Miyazaki, Isao Takahata. Os puedo asegurar que vi el primer capítulo de esta serie y me encantó. Lo mejor es el opening, cuya canción es pegadiza a más no poder.



Por cierto, no os perdais esta versión heavy de la canción de la mano del grupo nipón Seikima.

A partir de aquí y viendo su éxito cosechado, se hicieron multitud de versiones diferentes a anime en diferentes épocas tanto por la Toei como por la Fuji Televisión, , 1972, 1988, 1998... Incluso hasta nuestros días, ahora mismo hay una serie en abierto, abarcando varias generaciones de televidentes japoneses.


Además se realizaron varias adaptaciones a videojuegos en el 1997 y en el 2003. Pero eso no es todo, Gegege no Kitaro ha vuelto a ser noticia reciente, ya que el pasado mes de abril se estrenó su adaptación a película de imagen real, titulada Gegege no Kitaro. The movie, aunque según he podido leer, las críticas no son muy buenas. Os dejo con el trailer, para que juzgueis vosotros mismos:



Aunque apenas he podido ver un par de episodios animados de esta singular saga, creo que estamos frente a un manga-anime que merece realmente la pena echarle un vistazo. Me encantaría que se editara este manga clásico e influyente en nuestro país, pero teniendo en cuenta su antigüedad la verdad es que lo veo bastante chungo. Nos tendremos que conformar con los pocos capítulos que hay subtitulados en la red.



domingo, noviembre 04, 2007

Hello, Please! (I) Mascotas corporativas de alimentos japoneses.

Hace algunas semanas me pillaba en mi tienda de cómics habitual un libro americano de importación francamente interesante, titulado Hello, Please! No he podido evitar escanearos unas imágenes del mismo y hablaros brevemente sobre el fascinante mundo del diseño de las mascotas corporativas y su cuna de mayor producción, Japón.

Lo mono, o Kawaii como dirían ellos mismos, es lo que más fácilmente puede acercarse a nosotros psicológicamente a la hora de vendernos un producto, ya que al ver esos personajes tan adorables, pueden hacernos sentir como cuando eramos unos niños pequeños. Y los japoneses son los que mejor han sabido como explotar esta vertiente y crear verdaderos iconos pop para vendernos sus artículos. Sólo hay que ver la popularidad de la mascota de Hello Kitty! y sus productos (tiene hasta sus propias lineas aéreas), o el bichejo amarillo Pokemon con sus videojuegos y sus artilugios con su efigie. Siendo la cuna del manga y el anime... ¿Qué mejor sitio para ser una factoría de muñequitos graciosos?


Este libro creado por Matt Alt y Hiroko Yoda, nos muestra fotografías de estos entrañables seres en su entorno real, desde los supermercados, a las estaciones de metro y autobús o en los manuales de instrucciones de algún electrodoméstico. Como podéis ver, se encuentran por todas partes y están dispuestos con sus diseños adorables no pasen desapercibidos sus productos para el hombre medio japonés.

Para complementar mejor la obra, las fotografías vienen acompañadas de un breve texto que explica la función de cada muñequito en sí. En esta ocasión sólo voy a hacer incapié en las mascotas que salen en envases alimentarios, así que os haré una breve selección de los que más me han gustado. Por cierto, como todas eran tan sumamente graciosas me ha costado bastante dejar algunas en el tintero. ¿A que parecen los protagonistas de cualquier manga o anime?

Fugu con curry, " lo que no mata te hace más fuerte" reza en el envoltorio. Y si no, que se lo digan a Homer Simpson.


Unas lindas muñequitas muy similares a Tarta de Fresa nos venden sus productos en un supermercado de Tokio.


Unas preciosas frutitas y una sonriente botella de leche antropomorfa promueven a los niños a mantener una dieta sana, en una frutería.


Unas bolsas de plástico que nos venden castañas y un tipo de lechuga china con unos personajillos que parecen salidos del Dr. Slump.


Esta mascota de pelo rizado aparece en el envoltorio de una bolsa de algas wakame en un restaurante de sushi. A su derecha, un sonriente pedazo de tofu en yukata proclama el consumo de este producto producido con soja cultivada en los Estados Unidos.


¿Quien no se resiste a usar esta cocedera de arroz de aspecto tan adorable?



Esto me ha recordado que el otro día merendando con la Srta. Aeon, nos comimos unas galletitas para el té Taiwanesas (no sólo se da este fenómeno en el Archipiélago Japonés por lo que se ve) que llevaban una mascota corporativa dibujada. Por cierto, estaban deliciosas.



Siempre he sentido una atracción irreflenable a los muñequitos graciosos... ¿me convertiría en una consumista compulsiva si viajara al país nipón? ¿Podría resistirme a comprar tantos productos con unos reclamos tan sumamente entrañables?